“Árbol de tanta esperanza, naciste en medio del sol. Tu fruto madura y canta, hacia la liberación”. Así saludaba Vìctor la presencia de Luis Emilio Recabarren en el corazón del pueblo desposeído, que comenzaba a comprender que quien nada tiene, nada teme perder. Porque pese al ninguneo de la historia oficial, Recabarren sigue vivo en estrofas, murales y lienzos, y en la persistente memoria de quienes resisten la amnesia neoliberal.
Este 19 de diciembre de 2024, en el centenario de su muerte, la actriz Valeria Yáñez presenta la obra “Recabarren: Escena obrera. Entre la pluma y la pólvora”, rescatando la dimensión cultural del movimiento obrero de la época.
Recabarren representó el momento originario de las primeras organizaciones obreras, una figura clave en la idea de unificar la FOCH y de dotar de un partido político de los trabajadores, genuinamente identificado con una Revolución Rusa, que emergía deteniendo la guerra imperialista más sangrienta hasta la fecha y mostraba un modelo de sociedad basado en la organización socialista desde abajo. Ese Partido Comunista inspirado en el recabarrenismo, osciló entre la reforma y la revolución. Sus herederos, tarde o temprano sufrieron el rigor de la estalinización y con ello el legado fue distorsionado y despreciado, por representar un movimiento obrero libre de las regulaciones y sometimientos del Estado. Lo que fue dibujando un PC chileno cada vez más apegado a la institucionalidad y perdido en alianzas con partidos pequeño burgueses o directamente burgueses, en las que el pasado combativo se volvía incómodo.
Recabarren sigue siendo una de las piedras angulares de la historia del movimiento obrero, pero, siguiendo la intención de la autora, vale la pena apropiarse críticamente de su legado, para integrarlo al escenario de urgente reorganización de las y los trabajadores, tanto en Chile como el mundo, a partir de la aceleración de las crisis y las guerras.
Entre las páginas de este libro, se sienten los latidos de la palabra vociferada en las calles proletarias, o entreverada en el murmullo de las asambleas, que luego llegaba a un diario, sacado a golpes de tipografía, para conectar con los ojos sorprendidos de obreras y obreros de pueblos cercanos y lejanos, que despertaban el pensamiento propio, eslabón fundamental de la construcción cotidiana que nos dejó el siglo xx.
Editorial Ideas Socialistas y Editorial Quimantú
Septiembre 2024
“Árbol de tanta esperanza, naciste en medio del sol. Tu fruto madura y canta, hacia la liberación”. Así saludaba Vìctor la presencia de Luis Emilio Recabarren en el corazón del pueblo desposeído, que comenzaba a comprender que quien nada tiene, nada teme perder. Porque pese al ninguneo de la historia oficial, Recabarren sigue vivo en estrofas, murales y lienzos, y en la persistente memoria de quienes resisten la amnesia neoliberal.
Este 19 de diciembre de 2024, en el centenario de su muerte, la actriz Valeria Yáñez presenta la obra “Recabarren: Escena obrera. Entre la pluma y la pólvora”, rescatando la dimensión cultural del movimiento obrero de la época.
Recabarren representó el momento originario de las primeras organizaciones obreras, una figura clave en la idea de unificar la FOCH y de dotar de un partido político de los trabajadores, genuinamente identificado con una Revolución Rusa, que emergía deteniendo la guerra imperialista más sangrienta hasta la fecha y mostraba un modelo de sociedad basado en la organización socialista desde abajo. Ese Partido Comunista inspirado en el recabarrenismo, osciló entre la reforma y la revolución. Sus herederos, tarde o temprano sufrieron el rigor de la estalinización y con ello el legado fue distorsionado y despreciado, por representar un movimiento obrero libre de las regulaciones y sometimientos del Estado. Lo que fue dibujando un PC chileno cada vez más apegado a la institucionalidad y perdido en alianzas con partidos pequeño burgueses o directamente burgueses, en las que el pasado combativo se volvía incómodo.
Recabarren sigue siendo una de las piedras angulares de la historia del movimiento obrero, pero, siguiendo la intención de la autora, vale la pena apropiarse críticamente de su legado, para integrarlo al escenario de urgente reorganización de las y los trabajadores, tanto en Chile como el mundo, a partir de la aceleración de las crisis y las guerras.
Entre las páginas de este libro, se sienten los latidos de la palabra vociferada en las calles proletarias, o entreverada en el murmullo de las asambleas, que luego llegaba a un diario, sacado a golpes de tipografía, para conectar con los ojos sorprendidos de obreras y obreros de pueblos cercanos y lejanos, que despertaban el pensamiento propio, eslabón fundamental de la construcción cotidiana que nos dejó el siglo xx.
Editorial Ideas Socialistas y Editorial Quimantú
Septiembre 2024
Valeria Paz Yáñez Alvarez
Actriz titulada de la Universidad de Chile, investigadora, comunicadora social y locu-tora radial, co autora del libro Testimonios de los Cordones Industriales, reconstru-yendo la historia con sus protagonistas. Directora de la obra Cordones Industriales del Colectivo Artístico Tarea Urgente, del cual forma parte y con quienes ha llevado a escena Sala de Profes y Estado Terminal. Gestora cultural de Casa Marx Santiago. Militante del Partido de Trabajadores Re-volucionarios (PTR) y de la Agrupación de Mujeres y Disidencias Pan y Rosas.